Un escritor decadente está pasando por el peor momento de su vida, no tiene ideas para escribir, su piso es un estercolero y su novia le acaba de dejar. Todo eso cambia el día que prueba una nueva droga que hace que el cerebro se aproveche al 100% sacando el máximo rendimiento de uno mismo.
Sin límites es una película de ciencia ficción que está basada en la novela de Alan Glynn con el mismo nombre (The dark files, originalmente).
Esta película me gusta mucho, tanto en la historia como en la forma de narrarla ya que el director diferencia perfectamente los momentos en el que el protagonista está bajo los efectos de la droga (escenas más luminosas), con las que no.
Otra de las cosas que me gusta es que tiene un subtrama tipo thriller que hace que nos mantengamos en vilo durante casi toda la película.
Algo que no me ha gustado mucho es que el protagonista decide aprovechar los efectos de la droga para hacer fortuna y convertirse en un magnate de las finanzas y especulador Wall Street, un tipo de persona que no me gusta en absoluto, un auténtico capullo en mi opinión (aunque bien es cierto que en la película queda bien).
En definitiva, una película que no está nada mal, muy entretenida y bastante original en la historia que recomiendo mucho.
